F.J.L. hoy se acuerdaba de los éxitos cosechados por Yugoslavia para recordar que a los cinco años ya no existia ese país. Ayer fue el día de las entrevistas: ZP en El País, Felipe González en ABC, la ministra Garmendia en el Foro de El Mundo, Corbacho, Espe,... Para mi que todos querían estar en las mismas páginas que los 'niños' de moda. ¡Qué coñazo de políticos!
Hoy se agotan los periódicos deportivos. Mañana, Dios proveerá. La mayoría se acuerda del éxito de España sin olvidar que hay quien no se alegra. ¿Disfrutar de la victoria o restregársela por el morro a los rivales?. Por supuesto, lo segundo. En el Marca aparecen las fotos de todas las ciudades y sus celebraciones: en Bilbao una foto de un bar con cuatro gatos, en San Sebastián aparece una foto de una fuente, tan sólo se puede intuir que en alguna parte había alguien, en Vitoria una larga avenida vacía. ¿Hecho a proposito o realidad incuestionable?.
Hoy, el inefable Eduardo Inda, director de Marca por la gracia de Pedro J. escribía acordándose de los que criticaban a Luis Aragones y a Villar, sus dos íntimos amigos (más el segundo que el primero). Una muestra porque no tiene desperdicio: "Cuando hará cosa de diez años Ángel María 'Chulen' Villar dijo "no" al jefe de la 'Cosa Nuestra'-en realidad al 'consigliere' de El Padrino- en su despacho de Alberto Bosch sabía a que se exponía [...] La cacería al hombre por tierra, mar y aire fue prácticamente instantanea y no consistía en otra cosa que presentar como un chorizo a un hombre enfermizamente honrado, que gasta trajes de hipermercado, luce relojes de todo a 100 y vive en un piso de clase media [...] 'Cosa Nuestra' olvidó que Villar es bilbaino pero que bien podría haber nacido en la Ribera de Navarra o en Aragón. ¿Por qué? Pues porque en su ADN hay tenacidad en cantidades industriales. "¿Qué venís a por mí, pues muy bien, venid porque yo no me voy a ir", mascullaba [...] ".
De lo que no se debe acordar Inda es de lo que le costó imponer en el periódico que le entregaron la adoración a Villar. En un periódico acostumbrado a que les impongan directores de cuando en cuando este les cayó como una enfermedad más. Me acuerdo lo que me reí cuando junto a un redactor de los de casta, que allí abundan y que se dedican a hacer su trabajo lo mejor posible a pesar de sus jefes, pudimos leer en las páginas de Opinión una semblanza de Villar por parte de Inda cuando, el mismo día, el recien fichado como director adjunto Santiago Segurola (por una cantidad de dinero que el resto de los que allí trabajan jamas podrán soñar en ganar) cargaba sin compasión contra el propio Villar. La herencia es la herencia.
Tampoco se debe acordar Inda, porque no solía aparecer por la redacción, de como todos los periodistas detestaban a Luís. Me acuerdo como ponían, una y otra vez, el video de youtube de Luís Aragones visitando a un futbolista en el hospital en el que el de Hortaleza no estaba muy afortunado. Los calificatibos de los mismos que ahora dicen maravillas de él eran algo más que gruesos.
El caso es que este es el país en que nacimos y unos que también nacieron en esta piel de toro han ganado algo, al parecer importante, y eso nos da escusa para sacar de dentro todo lo malo que tenemos que es mucho. Eran las siete del domingo y en el barrio de Lavapies dos jóvenes colocaban con esmero una bandera franquista en el coche. La noche es joven.
El día anterior en Torre Pacheco, en medio del regocijo popular, se pasaban por el forro de los cojones los derechos humanos en una vergonzosa redada contra otro GRUPO HUMANO como el de los futbolistas de la selección pero con la diferencia de que estos son pobres y ya no los necesitamos aquí. Si jugaran como Marcos Sena hasta les nacionalizaban. ¡QUE ASCO!
Así no hay forma de alegrarse de nada.
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